Implementan dispositivos electrónicos de vigilancia 

Se reunieron representantes del Ministerio de Seguridad, Ministerio de Gobierno y Justicia y del Poder Judicial de La Pampa, con el fin de definir la implementación de dispositivos de vigilancia electrónicas (tobilleras), para condenados con el beneficio de prisión domiciliaria, y equipos duales utilizados en casos de violencia de género.
La jornada estuvo presidida por los ministros de Seguridad, Julio González, y de Gobierno y Justicia, Daniel Pablo Bensusán y el jefe de Policía, Roberto Ayala. En representación del Poder Judicial, participaron el ministro del Superior Tribunal de Justicia, Hugo Díaz, el procurador Mario Bongianino, fiscales generales, el juez de Ejecución Penal, Martín Saravia, y la fiscal de General Pico.
“Esto se inició el año pasado mediante la firma de dos convenios realizados con el Ministerio de Justicia de la Nación, donde se indicaba el aporte de los equipos necesarios para implementar en la provincia de La Pampa. Durante este año se trabajó en conjunto con el Poder Judicial, el Ministerio Público, el Ministerio de Seguridad y el Ministerio de Gobierno. La parte operativa estará a cargo del Centro de Control, Operación y Monitoreo Policial, CECOM, desde allí se controlarán los equipos obtenidos. Las tobilleras brindarán una solución con los condenados que reciban el arresto domiciliario, para descomprimir comisarías y la Alcaidía de la Provincia”, indicó el ministro de Gobierno y Justicia.
En relación a los equipos duales aplicables en casos de violencia de género, Bensusán sostuvo que “hasta hoy se está utilizando el botón antipánico; cuando la víctima dispara la alarma, es porque la persona con prohibición de acercamiento ya está muy cerca. Este dispositivo cuenta con la particularidad de que tanto víctima como victimario tienen el dispositivo instalado, por lo que saltan diferentes alarmas mientras se van acortando las distancias de las personas con prohibición de acercamiento. Es alertado desde el CECOM, para que la Policía tome las medidas de seguridad necesarias en protección de la víctima”, explicó.
El ministro resaltó la importancia del trabajo en conjunto con las diferentes áreas de los Poderes Ejecutivo y Judicial, “sirve para dar respuesta a los fiscales, para tomar medidas preventivas en los casos de género. En el caso de arresto domiciliarios, hoy existen, pero requieren de una guardia policial, y es grande la cantidad de efectivos que se disponen para estos casos; con esta implementación se liberan policías para los trabajos de calle que son tan necesarios”, concluyó.

Ministro de Seguridad
Por otra parte, el ministro de Seguridad hizo referencia a la operatividad de los equipos, “ya está todo en condiciones;  quiero destacar el trabajo interministerial y con los demás Poderes del Estado para articular políticas en materia de seguridad que permitan brindar respuesta ante situaciones complejas. Nos va a permitir ir descomprimiendo ciertas situaciones cuando los fiscales realicen el estudio de cada caso en particular. La parte operativa está dentro de este Ministerio, en el CECOM, y es la parte que nos toca dentro de este engranaje con los distintos Poderes”.

Ministro STJ
Hugo Díaz se refirió la importancia de la implementación de tecnología en materia de seguridad, “es un gran avance, teníamos graves dificultades por los alojamientos de detenidos y esto va a permitir ampliar el espectro. Por otro lado, es un gran aporte a la reinserción social, en cuanto a prisiones domiciliarias. El otro dispositivo, en protección de la mujer, también nos resulta de gran ayuda en los casos de violencia de género. Se ha trabajado mucho en los protocolos para formalizar el inicio de esta etapa; el Ministerio Público Fiscal ha puesto todo a disposición, junto al Poder Judicial, para que  salga bien, junto a los Ministerios del Poder Ejecutivo”, concluyó.

Procurador
En tanto, el procurador Mario Bongianino se refirió a la aplicación de esta nueva tecnología,  “no hace más que ayudar e incrementar los objetivos de la Ley 24660, en el sentido de la resocialización de las personas que han sido condenadas después de un juicio oral y público. Por el lado de la violencia de género, el dispositivo le quita a la víctima la presión del botón antipático, puesto que ahora sí ponemos en cabeza del violento, el agresor, el dispositivo, y por lo tanto liberamos a la víctima del autocuidado que podía resultar dificultoso en la aplicación”.