Mauricio es Macri

El reportaje que el periodista oficialista Luis Majul hizo al presidente de la Nación Mauricio Macri desnuda como ninguno la matriz del pensamiento del poder económico en la Argentina, que desde 2015 ocupa también el poder político a partir del triunfo de Cambiemos.

No vale la pena opinar sobre sus declaraciones de que estamos mejor que en 2015, que la pobreza de hoy no es estructural, que las obras publicas se construyen en todo el país, que no prometió pobreza cero, y otras afirmaciones mendaces, que se caen por su propio peso. La realidad las desmiente sin necesidad de demasiados análisis. Si creo que hay que profundizar en el concepto de “Calidad Institucional” que el presidente dice haber instalado en el país.

¿Puede haber calidad institucional en un país en el que un juez investiga a funcionarios y dirigentes políticos del partido de gobierno en relación a una red paraestatal de espionaje, y el primer mandatario solicita sea destituido? ¿Puede haber calidad institucional en un país donde se cree que ser republicano es dar conferencias de prensa a periodistas amigos al mismo tiempo que se intentó nombrar los miembros de la Corte Suprema de Justicia por decreto? ¿Es ético esperar a que muera su padre para reconocer que había pagado coimas, y no haber impulsado el accionar de la justicia mientras estaba vivo? Máxime teniendo en cuenta que el abogado del extinto Franco Macri aseguró que, cuando eso sucedió, los negocios de la empresa familiar estaba a cargo del actual presidente.

Pensar que “este es el único camino”, comparar el costo del gas o la energía en Uruguay, cuando ese país no es generador del recurso y lo importa casi por completo, decir que habla con los argentinos en sus viajes, cuando todo sabemos que hasta los timbreos están coucheados, es parte de la estrategia de Duran Barba para disfrazar las verdaderas intenciones del gobierno de los Ceos: hacer negocios, transferir ingresos desde los sectores medios y bajos hacia los grupos concentrados de la economía y limitar con el endeudamiento la capacidad de acción del próximo gobierno si pierden las elecciones.

El presidente fue beneficiado por un entramado de negocios que crecieron a la sombra de la dictadura, de la estatización de la deuda privada del grupo empresarial familiar realizada por Domingo Cavallo; fue procesado por el delito  de contrabando y evasión fiscal, investigado por espiar familiares mientras fue intendente de la Ciudad de Buenos Aires, y hoy se sospecha que avalo una red de espionaje paraestatal para perseguir opositores con la complicidad de los medios de comunicación concentrados y de la justicia corrupta de Comodoro Py. Sus campañas se basaron en Fake News y en la mentira más escandalosa en lo referido a promesas de campañas que se recuerde en la democracia argentina desde 1983.

Este reportaje le saco la careta: MAURICIO ES MACRI