Planta empaquetadora del CERET

«E.M. Verduras Express» ya supera las 10 mil bandejas mensuales.

 

El año pasado, en una de las visitas que el ministro de la Producción, Ricardo Moralejo, realizó al Centro Regional de Educación Tecnológica (CERET) de General Pico, había anticipado el futuro auspicioso y las expectativas que se tenían a partir de la creación de la planta de empaque de verduras frescas. El funcionario, en esa oportunidad, fue concreto al señalar que el CERET y el norte pampeano, con ese paso, revalorizaba su presencia demostrando todo su potencial.

“Estamos con la planta láctea terminada e inaugurada, ofreciendo productos a toda la sociedad; transformamos al CERET en un centro de investigación, capacitación, extensión, de tecnologías para la innovación de procesos productivos en todos los ámbitos de la Provincia”, dijo Moralejo en el intermedio de una jornada hortícola con especialistas y productores. En esa oportunidad, el ministro cortó virtualmente las cintas de una planta de empaque que ya estaba configurada como tal, lista para activarse.

“Creamos la infraestructura necesaria con todas las normas sanitarias, de tal forma que hoy el consumidor podrá hacerse de ese producto con la debida identificación como producto pampeano con garantía sanitaria y de calidad de primer nivel”, sostuvo al momento de referenciar la nueva etapa de trabajo en la planta de empaque que hoy, a cargo de Ezequiel Beltramo, está a punto de llegar al envasado de 10.000 bandejas con productos hortícolas frescos de primera calidad rotulados bajo la marca comercial “E.M. verduras Express”.

El joven, egresado del Instituto Provincial de Enseñanza Media (IPEM) 322 “Manuel Belgrano”, sede Villa Nueva (Córdoba) con orientación agropecuaria-industrial, producción de bienes y servicios, llegó a General Pico por cuestiones familiares y halló en el CERET, puntualmente en la planta de empaque, un espacio donde continuar experiencias similares en la materia desarrolladas en la provincia mediterránea.

“Como dijo el ministro ese día esto sirve para demostrar al productor la manera de darle valor agregado a los productos para llegar al mercado local, provincial y por qué no afuera de la provincia, es un desafío”, sostuvo en la entrevista. Desafío que, a decir de Moralejo y traslativo a la gestión del gobernador Carlos Verna, “está en todo el ADN de esta gestión del Ministerio y del Gobierno, esto es, darle valor agregado a nuestras materias primas, a nuestra producción primaria; buscamos un cambio de paradigma en La Pampa, queremos pasar de una economía predominantemente agrícola ganadera a otra donde la industria en general tome un valor preponderante”.

Producción en expansión

Mientras se prepara para la producción de hongos, desde el CERET se preparan estrategias para los nuevos desafíos. Hasta aquí, lo que hay, es un trabajo constante para -entre otras cosas- estimular la reproducción in-vitro en plantines para mejorar la genética. Se logró además un cambio de cultura en cuanto a la producción hortícola, y la planta de empaque está dentro de esas transformaciones positivas.

“Todos sabemos que las hortalizas de hoja vienen con muy mala calidad desde otros lugares y La Pampa sigue importando verduras desde otras provincias. En la planta de empaque trabajamos con la producción local en cuarta gama al cortar y envasar para entregar en bandejas en los comercios locales. Pero muchas veces la demanda nos exige y debemos buscar producción en otros lugares, pero lo que sale del CERET es de primer nivel y es ampliamente reconocido por los negocios”, señaló Beltramo quien no dejó de reconocer el gesto de los representantes de Gobierno al ofrecerle el alquiler del espacio.

“Ellos (por el Gobierno) decidieron tercerizar este servicio, nosotros ya veníamos trabajando antes de la remodelación y reinauguración de esta planta. Pagamos un alquiler por el uso, yo empecé en el año 2008 con un emprendimiento personal. En Córdoba siempre estuve relacionado con el rubro y cuando llegué a General Pico le dí continuidad porque ví que no había productos locales, todo venía de afuera”, agregó.

Beltramo, que antes de este proyecto había iniciado la actividad en un pequeño espacio de empaque fraccionando productos del CERET, encontró en el mismo Centro la “punta del ovillo” para expandir su trabajo de la mano de nuevas tecnologías y con un estricto control sanitario. “El control sanitario de los vegetales debe ser monitoreado e higiénico desde la cosecha como en la recogida de los mismos, con el objetivo de no contaminarlos para el consumo final. Los vegetales frescos, dadas sus características, son susceptibles de daños y contaminaciones microbiológicas, químicas y físicas durante la manipulación de la cosecha, traslado al lugar de empaque y distribución a los puntos de ventas. Ese control es fundamental, nosotros le damos seguridad al consumidor”, suscribe respecto a la calidad de la producción que llega al cliente.

Sanidad y calidad garantizada

“Llegar a la planta fue cerrar un círculo virtuoso que había iniciado el CERET en este rubro. La planta está habilitada con todos los controles y requerimientos nacionales, es garantía de calidad y sanidad. General Pico tiene una excelente producción hortícola y antes de nuestra incursión los productos envasados llegaban de varias provincias (Santa Fe y Mendoza), pero con una calidad deficiente por los lógicos problemas que se generan con el traslado y cambios en la cadena de frío. Acá cortamos a la mañana y a la tarde está en la góndola, ésa es la clave del éxito que estamos teniendo desde hace una década”, justificó.

La mercadería que sale de la planta viaja en un móvil refrigerado, desde el corte a la góndola la producción empacada llega en cuestión de horas. “A las 7 se cosechó, una primera tanda se entrega a las 11 y todo el resto a las 17 está entregado. Hoy estamos produciendo más de 10 mil bandejas combinadas mensuales. Incluye lechuga, lechuguín, rúcula, lechuga amarga, achicoria, lechuga morada, acelga, apio, cebollas de verdeo, calabazas, zapallos, zanahoria, remolacha, repollo blanco y morado y tomates cherry”, describió.

De cuarta gama

Los productos “E.M.” son considerados de cuarta gama porque se aplica un mínimo proceso para llegar a bandejas listas para ensalada y cubeteadas en invierno para la preparación de sopa. Beltramo junto a otras cuatro personas prepara diariamente la venta a despensas, supermercados, rotiserías y restaurantes con la garantía de ser un proceso productivo realizado con instalaciones adecuadas. El producto es cortado, pasado a cámara, es seleccionado, lavado, centrifugado, cortado y envasado bajo normas de higiene y sanidad necesarias.

Lejos quedó para Beltramo ese inicio donde, a tabla y cuchillo, el cordobés de origen comenzó a darle forma a esta realidad. Y en esa línea, desde hace tiempo, el Ministerio se involucra en estas actividades como parte del directorio del CERET, con la idea de que el mismo provea de insumos a la producción hortícola pampeana, “Esto es válido tanto para quienes deseen transformar la horticultura en sus actividades económicas primarias, o en forma secundaria. Por lo tanto, una de las principales consideraciones está referida a la escala que tiene que tener cada planteo para que sea coincidente con las expectativas de quienes se inician en esto”, consideró el ministro respecto a su gestión.

“Es muy importante que cada uno, en cualquiera de las escalas, se comprometa con la generación de alimentos sanos, de origen local, frescos, que lleguen a la sociedad al mejor precio posible”, concluyó.