El 28 de octubre de 2020 volverá a hacerse un Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas. Además de las preguntas de rigor que suelen tomarse en cuenta para la encuesta, en el grupo de las que se incorporan figura la identidad de género autopercibida, el número de DNI, casos de descendencia étnica indígena o afro, lugar y domicilio del trabajo, nombre de la carrera universitaria o terciaria cursada y religión.
El Censo más importante del país se realiza cada década y en forma ininterrumpida desde mediados del siglo XX, tal como recomienda la Organización de las Naciones Unidas para la ejecución de las rondas censales según la referencia del INDEC. El organismo estadístico nacional puso «a disposición de los usuarios» el diseño y el plan de actividades en los documentos, disponibles en www.indec.gob.ar.
Según el Instituto, en el sitio «se exponen las cédulas censales preliminares, el marco legal, la sinopsis metodológica, el cronograma de fechas clave y la estructura de recursos humanos necesarios para la realización del operativo estadístico de mayor envergadura para un país». El INDEC relevará «todas y cada una de las viviendas, hogares y de las personas presentes en el territorio nacional en la fecha estipulada».
Bajo ese objetivo el organismo estadístico propició el domingo 8 de septiembre pasado la realización de la Segunda Prueba Piloto, que se cumplió en unos 10 mil hogares pertenecientes a las localidades de Humahuaca, Aparzo, Palca de Aparzo y Coctaca, en Jujuy, y en áreas seleccionadas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, San Carlos de Bariloche (Río Negro) y Mar del Plata (Provincia de Buenos Aires)».
Novedades
La directora General de Estadística y Censos dependiente del Ministerio de la Producción de la provincia de La Pampa, licenciada Laura Biasotti, destacó que en el marco de la prueba piloto unas 10.000 viviendas fueron relevadas en Jujuy, Río Negro, Buenos Aires y Capital Federal, momento que se tuvo como objetivo analizar las capturas de datos y la logística operativa, entre otras cuestiones. En ese terreno Biasotti tomó parte junto al resto de los directores provinciales de la prueba en San Carlos de Bariloche en calidad de “observadores no participantes”, tomando nota entre otras cuestiones los roles del censista y del censado.
En San Carlos de Bariloche, el relevamiento involucró un millar de viviendas ubicadas en dos radios específicos. A consideración de Biasotti el operativo permitió evaluar, principalmente, el funcionamiento de las cédulas censales preliminares y los tiempos de entrevista; el proceso de convocatoria, reclutamiento y selección de la estructura operativa; la capacitación virtual y presencial; la captura de datos y la logística operativa.
Entre las novedades del cuestionario de población previsto para el año próximo se distinguen algunas preguntas como las relacionadas a la identidad de género, el autorreconocimiento étnico (pueblos indígenas y afrodescendientes), el nombre de la carrera universitaria de grado o terciaria que completó la persona censada, la religión, la movilidad por motivos laborales y el número de Documento Nacional de Identidad para el futuro uso estadístico de registros administrativos y la producción oportuna en períodos intercensales.
Como en todo operativo que conduce el Instituto de Estadística y Censos, los datos personales de los censados se encuentran estrictamente protegidos por el secreto estadístico dispuesto en la ley nacional 17.622. Para el último Censo Nacional de Población, en la provincia de La Pampa, resultó necesaria la participación de unas 6.000 personas número que, a entender de la Dirección General de Estadística y Censo provincial, podría mantenerse o ser levemente superior para el año próximo.
“La idea perseguida en esta etapa fue la de observar el desempeño de los censistas y los censados, si la cédula censal sirve o hay que corregirla, si la persona entiende o no lo que se le está preguntando o si el censista no hace bien el interrogatorio, si las capacitaciones sirvieron o no, tomamos el tiempo de la entrevista, el tiempo que le lleva al censista completar los datos, todas cuestiones que suman al resultado final ya que cada censista tiene una carga de 40 viviendas” expresó Biasotti.
Sobre algunas de las novedades que tendrá el Censo 2020, puntualmente respecto al pedido del número de DNI, Biasotti precisó que se hará “pensando en los futuros censos que se podrían hacer mucho basándose en los registros administrativos, para evitar la salida a campo por -entre otras cuestiones- los costos que se generan. Hay que pensar que para cualquier trámite se pide el número de DNI y uno podría hacer un censo basado en esos registros administrativos y salir a campo sólo a preguntar algunas cosas puntuales” explicó.
Finalmente, destacó que la incorporación de los flamantes puntos en el cuestionamiento final quedará supeditada al análisis que haga el INDEC en cuanto a nivel de respuesta y que, tales incorporaciones se decidieron en base a “una demanda de diferentes actores a nivel nacional que pedían contar con esa información”. Por otra parte cabe indicar que una semana antes de la prueba piloto, Biasotti tomó parte junto a 24 directores provinciales de estadísticas de la reunión plenaria concretada en la sede del INDEC.