El precio de las frutas y verduras en Argentina aumenta más de 6 veces (en promedio) entre lo que cobra un productor, que es realmente muy poco, y lo que se paga en góndola.
La Confederación Argentina de Mediana Empresa (CAME) informó que sólo en agosto la brecha de esta diferencia creció un 8.3%, claramente los costos y desventajas la viven los dos extremos de esta cadena y los beneficios quedan para los intermediarios.
Mientras el productor cobra muy poco y es quien mayores gastos y trabajo tiene a la hora de obtener su producto, y los consumidores son los que pagan los altos precios, son los intermediarios y grandes cadenas y comercios los que aumentan los costos y reciben grandes ganancias.