El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Deniel Arroyo, pidió la renuncia del secretario de Articulación de Política Social, Gonzalo Calvo, a quien responsabilizó por el pago de sobreprecios en la compra de alimentos destinados a los sectores más vulnerables de la sociedad.
En medio de la polémica medida, justamente criticada porque no se entendió la justificación de las compras a valores muy por encima de los precios normales, y siendo el Estado quien había acordado precios máximos con las empresas, se puede decir que Arroyo reaccionó a tiempo y con la renuncia pudo salvar, en parte, esta injustificada acción.
Lo cierto es que en la negociación política, dicho ministerio se armó con personas de diversos sectores que formaron parte del Frente de Todos, en ese sentido, el presidente fue claro: “Confío en Daniel Arroyo y él va abrir una investigación interna. Me preocupó lo que me dijo del tema de los precios y eso habla de una cartelización y no podemos permitir el abuso de precios. Y si hay un tema de corrupción yo mismo lo voy a perseguir”.