El presidente de la Comisión de Fomento de Pichi Huinca, Carlos Ferrero, ofreció un panorama local dentro del contexto de pandemia.
Ferrero admitió que al principio de la cuarentena se arrancó con incertidumbre por la ausencia de información «y el hecho de atravesar algo nuevo de lo cual no se sabía lo que podría pasar. Hubo temores, pero en el tiempo se fue aprendiendo, cuidándonos y recomendando a la población sobre su cuidado con un gran trabajo con la gente de Salud pública y la Policía provincial”.
Destacó que se concientizó a la población y remarcó que la situación dentro de la Provincia es buena “gracias a las medidas que tomó el gobernador Sergio Ziliotto y si a eso se le suma la flexibilización de la última semana donde la gente pudo salir a caminar, realmente estamos bien”.
Ferrero puntualizó que al principio “hubo resistencia de la gente del pueblo a cumplir las normas ya que por tratarse de una localidad pequeña y algo nuevo, todos decían acá no llegará, pero la aparición de los primeros casos llevó a la gente a tomar conciencia y el temor de que puede llegar a cualquier punto de la población. Cada vecino comenzó a quedarse en su casa y se apuntó a un buen trabajo con los comercios, sobre los horarios de apertura y la circulación de gente».
Mencionó que la flexibilización permitió ir haciendo algunas obras como la reconstrucción de cordón cuneta, ampliación y limpieza de un canal, mantenimiento de caminos vecinales como así también el mantenimiento del pueblo con sus espacios verdes. Aclaró que “siempre se mantuvo la recolección de residuos, la planta de tratamiento de agua con sus cuidados correspondientes”. Con respecto a la Comisión de Fomento informó que se mantuvo abierta “con personal y horario reducido en base a que se está en plena campaña de cosecha y se necesita sacar las guías de cereal o de hacienda ya que el campo es una de las actividades exceptuadas. Así que el trabajo fue bueno en todo sentido”, puntualizó.
En lo laboral consideró que no hay problemas «porque la mayoría de la población tiene un trabajo ya que hay que gente que lo hace en forma particular, en la zona rural o en una dependencia del Estado, así que si tomamos casa por casa hoy no hay una vivienda en la cual uno de los integrantes de la familia no tenga trabajo”, enfatizó
Sobre la situación social admitió algunos inconvenientes con el cierre de los bancos y con jubilados que “no están habituados al uso de la tarjeta de débito y sin la compañía de algún adulto, así que en esos casos puntuales los asistimos y hoy por hoy no tenemos una problemática de asistencia al pueblo”, finalizó.