Lejos de transmitir un mensaje esperanzador, las autoridades de la Organización Mundial de la Salud advirtieron que hoy no hay solución «y quizá nunca la haya».
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una conferencia de prensa en línea agregó que se espera «tener un número de vacunas eficaces que puedan evitar que la gente se contagie», pero entretanto frenar los brotes depende del respeto de las medidas de salud pública.