Desde este lunes, con la participación de 15.000 voluntarios, en el Hospital Militar inicia la prueba de la vacuna contra el COVID-19 en el país.
En ese marco, el ministro de Salud, Ginés González García, se esperanzó en que esté lista para inicio del 2021. “Por decisión del presidente estamos haciendo todo para que esté cuanto antes y que esté disponible para todos los argentinos. Ahí hay varias dificultades, una de ellas, los precios disímiles, que van 2,5 dólares hasta 40 dólares”, manifestó el ministro a un medio nacional.
Asimismo, González García defendió la suspensión de los encuentros sociales, que tanto afectaron la situación sanitaria disparando brotes, incluso en lugares donde el virus estaba relativamente controlado.
“En las últimas tres semanas empezamos a ver que siempre la causa era la misma, era una reunión social. Una reunión. Ahí nos dimos cuenta de que estaba apareciendo un escenario de reuniones que nosotros la verdad ignoramos. Volvimos a los asados, a las mateadas, a los encuentros masivos, y eso es un mecanismo que está demostrado que es brutal en la expansión de la circulación y por lo tanto en la cantidad de enfermos”, explicó.
El infectólogo Fernando Polack, detalló que la intención es aplicar la vacuna a una población diversa de voluntarios, con un rango de entre 18 y 85 años, apuntando primero a los trabajadores esenciales.