A la espera de los últimos índices respecto a inflación, desocupación y pobreza en el país, se habla de un 3.6% en noviembre y 4% en diciembre (inflación), los números son cada vez más preocupantes ya que miles de argentinos y argentinas se hunden y endeudan cada vez más.
Son datos concretos, 6 de cada 10 chicos y chicas menores de 17 años son pobres en Argentina, con una canasta básica en $50.000 pesos y cada vez menos familias con la oportunidad de llegar a esa cifra para satisfacer las necesidades básicas.
La desocupación crece mes a mes, productos de la frágil infraestructura de un Gobierno neoliberal y de una nueva gestión que hasta el momento solo asiste con planes sociales a los más vulnerables, pero que lejos está de generar empleo genuino para dicho sector.
Los números no mienten y duelen, la realidad se marca con datos oficiales, precios por las nubes, aumentos cotidianos, falta de empleo y oportunidades para los y las jóvenes. El primer semestre del año cerró con un 40.9% de la población bajo la línea de pobreza, número que aumentará en el cierre del 2020, al igual que la desocupación, que en la primera mitad del año se ubicaba en el 13.1%.