Claro está que los tiempos de vacunación se dilatan cada vez más y que la inmunización de trabajadores esenciales y grupos de riesgo se demora, generando serios inconvenientes y, principalmente, cobrándose miles de vidas.
En este contexto las autoridades nacionales habían dicho que Argentina estaba en condiciones de vacunar a unas 5 millones de personas en enero y a otras 5 en febrero, con un objetivo aún mayor para los próximos meses, tal vez se esté preparado pero las vacunas siguen sin llegar o lo hacen a cuentagotas.
Hoy surgió una nueva alternativa, Argentina podría producir la Sputnik según se informó, motivo por el cual habrá una serie de reuniones entre autoridades de ambos países para ver si se aceleran los procesos.
La determinación de la administración de Alberto Fernández es avanzar «en un proceso de transferencia de tecnología, para que eventualmente la vacuna (desarrollada por el Centro Gamaleya) pueda producirse en Argentina», afirmó el nuevo embajador en Rusia, Eduardo Zuain. al tiempo que anunció que el presidente Alberto Fernández podría visitar el Kremlin.