Un dato aportado por el presidente Alberto Fernández en relación a la política habitacional del país dejó en claro la tradicional frase «dato mata relato»; al salir al interior el mandatario reafirmó su compromiso federal y volvió a cargar contra los beneficios del centralismo porteño. Con Macri se entregaron 14.000 viviendas en cuatro años, incluidos los créditos UVA, este Gobierno ya entregó 45.000 y está construyendo 102.000 más.
Contando que al ser hijo de un riojano siempre realizaba el recorrido de La Rioja a Capital Federal, Fernández sostuvo: «Argentina se decía ser un país federal pero los hechos no lo eran. Argentina concentraba su riqueza en el centro del país y tenía como una periferia al norte y una periferia al sur, y repetía una y otra vez que no me sentía cómodo viviendo en un país donde hay un país central y dos periféricos, porque la Argentina es una».
Llamando a un desarrollo argentino, al que diferenció de hacer crecer a Argentina, el mandatario explicó que el crecimiento muchas veces es injusto, porque no alcanza a todos. «Una sociedad se desarrolla si todos se desarrollan, pero una sociedad donde unos pocos acumulan y millones distribuyen pobreza, esa es una mala sociedad. Una sociedad donde tiene un lugar que crece y ese crecimiento se concentra, mientras el resto del país se empobrece, es un mal modo de crecimiento; nosotros tenemos que lograr que la Argentina se desarrolle».
Dato mata relato
El presidente contó que en la actualidad hay 4.600 obras públicas en marcha en el país, y que desde su llegada al Gobierno nacional se entregaron cerca de 45.000 viviendas, «el gobierno que me precedió (Mauricio Macri) en 4 años entregó 14.000, con los créditos UVA, en este momento se están construyendo 102.000 viviendas a lo largo y ancho de Argentina».