Una sociedad para mantener beneficios

«Yo no te toco a vos pero cumplime con esto», una pequeña frase que resume lo ocurrido con la no aprobación del artículo para que quienes trabajan en el Poder Judicial paguen Ganancias.

La situación política y de manejo de Argentina es muy clara y queda cada vez más en evidencia; el Poder Judicial, que es independiente de los otros poderes del Estado, responde más a intereses económicos y político-partidarios que a cuidar a las y los argentinos haciendo cumplir las leyes de manera igualitaria.

Esta vez, amparado en la protección de la oposición, que muchas veces se benefició con fallos, con falta de investigaciones, y hasta con inventos que tras elecciones caían por su propio peso, lograron una vez más voltear un artículo que exigía, como a cualquier trabajador y/o trabajadora, pagar Ganancias.

Sus sueldos son millonarios, ganan de manera mensual cifras insólitas para un país tan desigual, pero la avaricia es tan grande que lejos de aportar buscan cada vez más. Asimismo están amparados en la protección mediática, ya que nadie se refiere a los salarios percibidos, principalmente por jueces y fiscales, porque de conocerse sin dudas generaría mucho malestar social.

Una Justicia que no funciona y está llena de privilegios también se transforma en un grave problema para un país en el que lejos de pensar en una salida conjunta se cierra cada vez más en intereses partidarios y/o peor aún, personales (de ambos lados de la grieta).

Para el bien de la sociedad sería bueno dejar muy en claro quienes fueron los legisladores y legisladoras que avalan este tipo de privilegios en Argentina, ya que son votados para defender los intereses del pueblo y no de un grupo de personas.