En una audiencia con representantes de la central sindical italiana CGIL, el Papa Francisco aseguró que no hay trabajadores libres sin sindicatos, en un mundo donde aún existe la explotación laboral por parte de empresarios que ven a las personas como máquinas. Justamente días atrás el ex presidente Mauricio Macri destacaba el «modelo» de Qatar, donde no existen los sindicatos – entre otras cosas-, poniéndolo como ejemplo a seguir.
Así, el Papa destacó lo que representa tener empleo y todos los beneficios que ello trae para las personas y sus familias, en ese camino llamó a crear mejores condiciones de seguridad en el ámbito laboral y rechazar la explotación de personas.
«Todavía hay demasiados muertos, mutilados y heridos en el lugar de trabajo», recordó Francisco.
Curiosamente Mauricio Macri dijo, días atrás, que admiraba el «eje» de Qatar porque «ellos no tienen complejos, traen a los mejores educadores y todo se mide, se evalúa y se capacita», omitiendo que es un país gobernado por una familia, que no existe la democracia, que para hacer el Mundial se trajo a trabajadores de todo el Mundo en condiciones inhumanas, con miles de pérdidas y desapariciones en una clara muestra de explotación laboral.
Una vez más queda clara la forma de pensar, así las y los trabajadores no tienen derecho, todo se mide en términos económicos y solo se prioriza el bienestar de un grupo de personas multimillonarias que cada vez buscan más dinero. Encima responden a intereses que vienen de otro país, intentando crear modelos con la complicidad de algunos medios de comunicación y la Justicia, que muy lejos están de medir con la misma vara.