Una familia destrozada y un grupo de jóvenes (conocidos como rugbiers en este hecho que tomó trascendencia pública en el verano de 2020) esperando por su sentencia luego de matar a Fernando a la salida de un boliche.
Son jueces del Tribunal, María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari, en tanto, el abogado de la familia de Báez Sosa pidió perpetua para los asesinos.
El abogado Fernando Burlando aseguró que los imputados “acordaron y planearon emboscar con la intención de matar a Fernando Báez Sosa. Lo hicieron luego de un incidente menor dentro del local bailable Le Brique, donde la víctima y las personas que la acompañaron intentaron calmar los ánimos, evitar una pelea, recomponer la situación”.
“Pese a esto los acusados tomaron una decisión: tomaron la decisión de matar y mataron. A partir de hoy vamos a demostrar que el asesinatos de Fernando Báez Sosa tuvo como mecánica un asalto por ambos flancos de la víctima, luego se espera que el personal policial que vigilaba la zona se retirara del lugar para así facilitar la tarea y así matar sin riesgo y sobre seguro”, continuó.
“Vamos a demostrar que los acusados tendieron esa noche un verdadero cerco humano con la finalidad de poder asegurarse actuar sobre seguro y tener certeza que su presa no iba a poder eludirlos y mucho menos contar con ayuda, ayuda que demostraremos que otras personas quisieron otorgarle y no pudieron debido a la muralla infranqueable que construyeron sobre la víctima. El crimen fue una lisa y llana ejecución. No estuvieron dispuestos a detener su accionar hasta no ver sin vida al individuo. Cada golpe aplicado tenía un destino y un fin: matar”, agregó, pidiendo perpetua para los 8 jóvenes, que observaban desde el recinto.