Agro: Año seco, mercados volátiles

Si bien el 2023 llego con lluvias para algunas zonas, estas siguen “esquivando” muchas áreas claves de la región pampeana que vienen arrastrando un déficit hídrico hace semanas y requieren aportes enormes de agua para restablecer condiciones de humedad mínimas para el desarrollo de los cultivos de granos gruesos.

La Falta de agua no solo afectara al campo sino a la economía argentina ya que las liquidaciones del campo caerían hasta un 36%.

El mercado local se ve con una dinámica comercial estable con respecto a la demanda, aunque con poco volumen de operaciones, comparado con diciembre, resultado del dólar Soja, donde aquellos productores con intenciones de vender aprovecharon los valores por arriba de los $100.000

Con respecto al maíz, las ventas se ven retraídas por la falta de certezas de cuanta cosecha se va a levantar y el productor prefiere ser conservador a la hora de liquidar los stocks.

Si hablamos de trigo, ya cerrada la cosecha, el grueso de la comercialización está pasando por los molinos que pagan por calidad, ya que la mayoría de los exportadores se encuentran retirados de mercado. 

En el mercado internacional las condiciones secas en Argentina continúan generando preocupaciones en el mercado, lo que da soporte a los contratos de soja y los lleva a negociarse en terreno positivo.

Por su parte, compras de oportunidad dan soporte al maíz. Sin embargo, los precios se encuentran presionados debido una merma en la dinámica de exportación del grano amarillo. En este sentido, el USDA informó que los exportadores de EE.UU. ubicaron 319.200 toneladas durante la semana que finalizó el 29 de diciembre, por debajo de lo esperado por los analistas.

Los futuros de trigo continúan con tendencia al alza ante las preocupaciones en torno a la condición de los cultivos de invierno en territorio estadounidense, aunque la abundante oferta del cereal en el Mar Negro y expectativas de una buena cosecha en Australia, limitan la subas.

Fuente: Agroeducación