El presidente Alberto Fernández abrió hoy la VII Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que se desarrolla en el Sheraton Buenos Aires.
«Ha llegado el momento de hacer del Caribe y de América Latina una sola región que defienda los mismos intereses para el progreso de nuestros pueblos”, sostuvo el mandatario, y subrayó que “para eso tenemos que trabajar unidos, porque es mucho más fácil lograr esos resultados juntos”.
Al mismo tiempo destacó la importancia de “trabajar para garantizar y fortalecer la institucionalidad en la región». En esa línea advirtió: «Creemos en la democracia y la democracia está en riesgo. Después de la pandemia sectores de ultraderecha se han puesto de pie y están amenazando a cada uno de nuestros pueblos”.
El Jefe de Estado señaló que «ahora que estamos en una CELAC completa con la vuelta de Brasil, la oportunidad de unir a la región es un imperativo que se nos impone y tenemos que lograrlo”, y añadió que «la globalización no funciona tal como funcionaba y dejó en evidencia las carencias del sistema económico”.
Además, consideró que “tenemos todas las posibilidades de desarrollarnos unidos. Lo único que debemos hacer es profundizar nuestro diálogo. Quienes están aquí han sido elegidos por sus pueblos y, más allá de lo que cada pueblo decida, en la diversidad debemos respetarnos y crecer juntos”.
“Sabiendo que es un esfuerzo que bien vale la pena, porque tiene que ver con el progreso de nuestros pueblos, tenemos que convertir todos estos deseos y palabras en instituciones y en hechos; tenemos que hacer que la integración sea una realidad, que sean acciones que nos permitan avanzar”, enfatizó.
“Tengo la tranquilidad de que este año puse a América Latina en el lugar que se merece”, apuntó el Presidente, y concluyó: “Solos valemos poco. Unidos podemos tener una fuerza arrolladora”.
A continuación, el ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero, expuso un informe de las acciones realizadas durante el año en el que la Argentina ejerció la Presidencia Pro Tempore del organismo regional, teniendo como horizonte la reducción de brechas y la protección del medio ambiente en América Latina y el Caribe.