En el marco del plan de castraciones que lleva adelante la Municipalidad de General Pico, durante el mes de septiembre se efectivizó el traslado del Quirófano al Nuevo Refugio Canino con el objetivo de asistir, en caso de ser necesario, a los animales de compañía que allí se presenten, y continuar la labor en cuestión.
El director de Zoonosis y Vectores, Matías Calmels, comentó: “Hace un tiempo atrás concretamos este movimiento y desde el día 2 de octubre comenzamos con las cirugías. Estamos trabajando en conjunto con la Facultad de Ciencias Veterinarias y, con anterioridad a esto, junto a estudiantes que están realizando la orientación en Pequeños Animales”.
“Nosotros tenemos una dinámica en la cual las asociaciones proteccionistas tienen prioridad en la asignación de turnos en el Refugio Canino. En caso que en algún momento no tengan demandas, sí tomamos aquellos de la lista que nos aportan las inscripciones por internet, casos en los cuales también pueden asistir con felinos”, continuó el funcionario, quien en torno a ello, afirmó “llamaremos a quien le toque, y sino continuará en espera para castrar en una veterinaria privada, pero todo esto nos resulta útil para adelantar tiempos”.
En relación a las expectativas en cuanto a las intervenciones a realizar consideró: “Siempre depende de la necesidad, pero estamos entre tres y cuatro caninos por día. Volvemos al número que teníamos en el espacio anterior, con alrededor de 60 cirugías mensuales”.
Cabe resaltar que cada uno de los perros que arriban a este espacio también atraviesan por este proceso para luego ser otorgados a vecinas y vecinos bajo la premisa de una adopción responsable.