Una más del presidente de la Nación, mientras llamó a una «rebelión fiscal» para perjudicar al Gobierno de Buenos Aires sigue sin enviar los recursos que, por Ley, corresponden a las provincias.
Esta medida no solo habla de la irresponsabilidad de un presidente que cree sigue como panelista de televisión, sin darse cuenta que rige los destinos de un país y, con ello, la vida de 45 millones de argentinos y argentinas.
En dicho contexto el gobernador Axel Kicillof anunció un aumento del 13,5% en los salarios de marzo para los trabajadores de la provincia de Buenos Aires, además defendió el cobro de impuestos al mismo tiempo que desmintió que haya habido un «impuestazo» en su provincia.
La Legislatura bonaerense dispuso no poner un tope a la tasa del Impuesto Inmobiliario que se le cobra a solo dos mil propietarios de terrenos valuados en más de 3 millones de dólares.