En La Pampa, Salud Pública garantiza mil colonoscopías anuales
Cada 31 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer Colorrectal, una fecha destinada a crear conciencia sobre la importancia de la detección temprana y los cuidados preventivos para combatir esta enfermedad.
La detección temprana del cáncer colorrectal permite alcanzar tasas de curación superiores al 90% en la mayoría de los casos. Por esta razón, resulta esencial realizar estudios y pruebas diagnósticas, especialmente en personas mayores de 50 años que no presenten síntomas aparentes. Esta medida preventiva puede marcar la diferencia en la lucha contra esta enfermedad.
El cáncer colorrectal (CCR) afecta al intestino grueso, que incluye el colon y el recto. Es más común en personas mayores de 50 años, aunque puede desarrollarse a cualquier edad. Generalmente, esta enfermedad inicia como pequeños pólipos en el revestimiento interno del colon. Estos pólipos, si no se detectan y extirpan a tiempo, pueden transformarse en cáncer en el transcurso de 10 a 15 años.
Estudios indican que entre el 80% y el 90% de los casos de CCR están asociados a estas lesiones precursoras, lo que destaca la importancia de los controles periódicos. La prevención juega un rol clave, ya que mediante la detección y eliminación oportuna de estos pólipos es posible evitar la aparición del cáncer.
Programa provincial
Con el objetivo de reducir la mortalidad por cáncer colorrectal (CCR) en La Pampa se puso en marcha en 2016 un programa integral que asegura el acceso gratuito a herramientas diagnósticas esenciales. A lo largo de estos años, merced al fortalecimiento de las estrategias desarrolladas e implementadas a través de las cuales se busca acercar este servicio a la comunidad, el programa hoy tiene la capacidad de garantizar la realización de más de 1,000 colonoscopías ampliando su alcance más allá de las prestaciones habituales de los hospitales de cabecera.
Entre estas técnicas diagnósticas se destaca el test de sangre oculta en materia fecal, una prueba sencilla y eficaz, recomendada principalmente a personas mayores de 50 años que no presenten síntomas ni antecedentes familiares. Este examen permite detectar pérdidas microscópicas de sangre en las heces, lo cual puede ser indicativo de afecciones subyacentes.
En caso de obtener un resultado positivo, el protocolo incluye la realización de una colonoscopía como estudio complementario, con el fin de identificar la causa del sangrado y descartar posibles patologías.
Ampliando la capacidad resolutiva local
Con el objetivo de garantizar una mayor accesibilidad y promover la participación activa de la población, desde la Subsecretaría de Salud Social y Comunitaria, a través de la Dirección de Gestión Sanitaria y APS, se implementa esta estrategia de atención descentralizada, mediante la cual un equipo multidisciplinario, integrado por especialistas en gastroenterología, instrumentadores y personal sanitario local, se moviliza con torres de colonoscopia para ampliar la capacidad resolutiva en el ámbito local.
El despliegue se lleva a cabo en hospitales nivel IV ubicados en puntos estratégicos como Victorica, General Acha, Guatraché, Eduardo Castex, Realicó, Toay y 25 de Mayo. Este enfoque descentralizado permite realizar colonoscopías directamente en los hospitales, evitando derivaciones innecesarias y ofreciendo un servicio de salud más eficiente, accesible y cercano a la población.
Además, el fortalecimiento de la Red Provincial de Salud resultó fundamental para el éxito de esta iniciativa. A través de la incorporación de tecnología avanzada, la capacitación constante de los profesionales y la consolidación de las instituciones de salud, se ha logrado un incremento significativo en la cantidad de pacientes diagnosticados oportunamente cada año.
Factores de riesgo y prevención
Incorporar hábitos saludables no solo es clave sino también un pilar esencial para reducir los factores de riesgo asociados con el Cáncer Colorrectal (CCR) y otras patologías. Mauro Lluch, gastroenterólogo y jefe del Servicio de Gastroenterología del Hospital de Complejidad Creciente René Favaloro, señaló a través de la Agencia Provincial de Noticias que aproximadamente el 75% de los casos de CCR ocurren en personas sin antecedentes personales ni familiares de la enfermedad, lo que subraya la importancia de adoptar medidas preventivas.
El funcionario explicó: «en el marco de la prevención primaria, el objetivo es disminuir los factores que pueden desencadenar el desarrollo del cáncer. Entre las principales recomendaciones para minimizar los riesgos se destacan:
Mantener una dieta saludable: incrementar el consumo de frutas, verduras y fibra, al tiempo que se reduce la ingesta de carnes procesadas y grasas saturadas.
Realizar actividad física: combatir el sedentarismo mediante, al menos, 30 minutos diarios de ejercicio, lo que contribuye significativamente a disminuir el riesgo.
Evitar el tabaco y el alcohol: el consumo prolongado de estas sustancias está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar CCR.
Controlar el peso: la obesidad representa un factor de riesgo importante, por lo que mantener un peso adecuado es fundamental.
El gastroenterólogo enfatizó que «un estilo de vida saludable y una dieta equilibrada juegan un papel fundamental en la prevención de esta enfermedad».
Asimismo, destacó la importancia de la detección temprana: “No es que el cáncer de colon aparece de un día para otro; comienza como una pequeña lesión, un pólipo, que puede ser detectado en forma temprana. Por este motivo es que se recomienda a todas las personas mayores de 50 años, incluso sin antecedentes familiares, realizar anualmente el test de sangre oculta en materia fecal, que permite identificar pequeñas pérdidas de sangre. En caso de un resultado positivo, debe realizarse una colonoscopía para determinar la causa del sangrado».
En el mismo sentido agregó «En cuanto a las personas con antecedentes familiares, se recomienda acudir a un profesional de forma temprana. Los estudios preventivos deben iniciarse 10 años antes de la edad en que un familiar cercano fue diagnosticado. Por ejemplo, si un familiar presentó lesiones a los 40 años, el paciente deberá comenzar los controles a los 30 años. La adopción de estas estrategias, tanto preventivas como de detección temprana, resulta fundamentales para reducir la incidencia y la mortalidad asociadas al CCR, mejorando significativamente la calidad de vida de la población».