Del 26 al 28 de abril, la ciudad albergó el IV Congreso Nacional organizado por la Sociedad Argentina de Planificación Territorial. La actividad, que tuvo lugar en MEDANO, se concretó gracias al acompañamiento de la Municipalidad de General Pico y el Gobierno de La Pampa.
Esta jornada se realizó bajo el lema “Construyendo la agenda de Planificación Territorial post pandemia”, abarcando el análisis desde la crisis ambiental y sanitaria a la crisis económica, energética y alimentaria, bajo cinco ejes de trabajo: Gestión territorial, gobernabilidad y gobernanza; marco jurídico de la Planificación Urbana y del Ordenamiento Territorial y Ambiental; políticas para el hábitat, acceso a la vivienda y gestión del suelo; abordaje ambiental de la Planificación Territorial y la Planificación y Gestión Pública del transporte y la movilidad.
A raíz de ello, se elaboró una carta cuyo objetivo es compartir y dar a conocer a las y los ciudadanos, decisores políticos de los distintos niveles y jurisdicciones del Estado, concejalas, concejales; legisladoras y legisladores nacionales y provinciales, los temas tratados en los distintos paneles, mesas de experiencias regionales, diálogos con especialistas, profesionales de la planificación territorial y asistentes.
En lo que respecta a responsabilidades y roles del Estado en la orientación de procesos de planificación territorial, se alcanzaron numerosos consensos.
Éstos son recuperar la responsabilidad del Estado en la fijación y orientación del rumbo del desarrollo territorial equitativo, inclusivo y sostenible; institucionalizar la planificación territorial como una política de Estado; formular un Plan Nacional de Desarrollo Territorial que fije el rumbo y la racionalidad de las acciones de los gobiernos; impulsar el rediseño institucional de las agencias gubernamentales con competencia territorial y ambiental, como así también fortalecer las políticas públicas orientadas al desarrollo territorial desde la perspectiva de los derechos humanos.
En lo que hace a la gobernanza y los modelos de gestión de la planificación territorial, existió acuerdo alrededor de diferentes puntos.
Formular un modelo de desarrollo territorial que incluya un modelo de gobernanza que anteponga el interés común por sobre los intereses sectoriales; ampliar su base incorporando institutos de participación; propiciar la participación de los distintos actores de la sociedad para la conservación y restauración de los ecosistemas de humedal y bosque nativo; fortalecer a los gobiernos locales para el manejo de los sistemas de transporte público; reglamentar etapas e instrumentos de planificación territorial, como condiciones previas para el acceso al financiamiento de obras públicas, programas y proyectos.
Por otra parte, se establecieron prioridades relacionadas con los desafíos que plantea el escenario de la transición socio-ecológica sobre la agenda de la planificación territorial actual requieren focalizar las acciones en el marco del Cambio Climático y el cumplimiento de la Agenda 2030; también ampliar la capacitación técnico –política y organización funcional del Estado (en particular a escala municipal) para dar respuesta a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y fortalecer y complementar los marcos jurídicos de ordenamiento territorial y ambiental provinciales y municipales.