A mano alzada, en forma rápida y fundamentalmente en plena crisis social y económica en el país, los senadores y las senadoras de la Nación se aumentaron el sueldo. De $1.700.000 pasaron a $4.500.000.
Como es habitual y a las apuradas a fin de que pase lo más desapercibido posible, sobre el cierre de la sesión trataron el proyecto de aumento en las dietas sobre tablas, y no dudaron en mejorar sus salarios.
Así, mientras la mayoría de las paritarias están cerradas o no dan a basto para acompañar la inflación, en el Senado no ocurre lo mismo y son números récord.
Como es habitual Javier Milei trató de desligar a su espacio (La Libertad Avanza) de no votar el aumento, sí lo hicieron sus socios políticos de Cambiemos (al igual que el Peronismo y demás bloques), aunque segundos después y al ver quienes firmaron el proyecto para aumentarse el sueldo, estaba la firma de Bruno Olivera (San Juan) integrante del Bloque del presidente de la Nación.