Cultura presentó “Caminos del Agua”

La subsecretaria de Coordinación Cultural, Dini Calderón junto a los profesionales integrantes del equipo de la Dirección de Patrimonio Óscar Folmer y Matilde Ruggero presentaron: “Caminos del Agua”,Cerro de Los Viejos, un modelo de buenas prácticas, en Jornadas Universitarias.

Días atrás se realizaron las Jornadas Museos, Historia y Memoria. Aportes y reflexiones, organizadas por el Instituto de Estudios Históricos y Sociales de La Pampa (IEHSOLP – CONICET-UNLPam) e Instituto de Estudios Sociohistóricos y auspiciadas por la Municipalidad de Santa Rosa (Dirección de Turismo). Municipalidad de Toay (Dirección de Cultura), Dirección de Patrimonio, Departamento de Investigaciones Culturales-Archivo Histórico Provincial de la Secretaría de Cultura y Secretaría de Turismo del Gobierno de La Pampa.
La actividad tuvo como finalidad poner en diálogo los aportes teóricos sobre exhibiciones y museos entre diversos grupos de especialistas e investigadores noveles a nivel nacional y de otras áreas de Argentina, en especial de La Pampa. Debatir sobre las estrategias de las exhibiciones museales en diversos espacios, así como diversos aportes teóricos. Compartir e intercambiar elementos y resultados de investigación. Diseñar una agenda de trabajo futura entre las instituciones participantes y los asistentes para la realización de narrativas museales para La Pampa.
En ese marco, el equipo de la Secretaría de Cultura expuso el proyecto “Caminos del agua”. Cerro de los Viejos.
El mismo, impulsado por la Secretaría de Cultura provincia en conjunto con otros actores públicos, comunitarios y privados, desde la gestión de Carlos Verna, supuso un intenso trabajo de evaluación, investigación, “buenos oficios”, desarrollo e innovación tecnológica para la transferencia de contenidos científicos, diseño gráfico y guión  al servicio de la puesta en valor del sitio arqueológico Cerro de los Viejos para ser visitado con fines educativos y turísticos. Ahora se trabaja en un plan de manejo integral que pueda conservar y exhibir el lugar.

Un resumen de las acciones y su continuidad en esta gestión:
Con el correr de los años, en informes presentados por los equipos de arqueología se advertía sobre el estado progresivo de vulnerabilidad del sitio. Teniendo en cuenta esta situación y considerando los aspectos que destacan el valor de este bien patrimonial, en el año 2017 desde la Secretaría de Cultura de La Provincia de La Pampa, a través de la Dirección de Patrimonio puso en marcha las acciones necesarias para poner en valor educativo y turístico el sitio y garantizar el disfrute del mismo por parte de la población pampeana.
Se elaboró un proyecto para presentar ante el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología de la Nación, mediante la línea de financiamiento de Apoyo Tecnológico al Sector Turismo (ASETUR). El proyecto fue aprobado y a lo largo de tres años aportó parte de los fondos siendo el caudal mayor aportado por el gobierno provincial. 
El planteo inicial del proyecto proponía accesibilidad, estímulo a la investigación arqueológica, senderización, prevención contra el fuego, participación de comunidades indígenas y localidades vecinas, e innovación tecnológica para transferencia científica. La misión era ofrecer al público general un contacto directo con el sitio, su entorno e historia.
Los actores sociales involucrados en el proyecto son por un lado la Secretaría de Cultura del Gobierno de La Pampa, impulsora y quien gestiona el proyecto; la Secretaría de Turismo del Gobierno de La Pampa, Vialidad Provincial, La Escuela Nº 175 de Cuchillo Có,  la Biblioteca Popular “Walter Cazenave”, La Municipalidad de La Adela,  las comunidades indígenas de la provincia, el Museo Etnográfico de la Universidad de Buenos Aires, institución a la que pertenece el equipo de arqueólogos que brinda el asesoramiento científico dirigido por Mónica Berón.
Un dato de vital importancia es que el sitio arqueológico está emplazado dentro de un campo privado por lo que las relaciones con Humberto Iturrioz y su hermana Susana, dueños del campo desde que su abuelo materno y su padre lo compraron en 1952, fueron desde un comienzo, fundamentales. No era la primera vez que se acercaba gente de la capital provincial a plantear la intención de hacer algo, pero nunca se había concretado nada, con lo cual fue un arduo trabajo de negociación sentar bases de confianza mutua para poder avanzar con el proyecto. Al principio, Beto Iturrioz, quien fue el encargado de negociar con el equipo de cultura,  adoptó una postura reticente, pero amable. Mostró  sensibilidad por el patrimonio y conciencia de que el sitio se encontraba bajo protección legal y con una declaración patrimonial, lo que le daba ciertas facultades al Estado sobre su propiedad. Por lo tanto el diseño de un plan de manejo era un interés compartido. Fue pasando el tiempo y la confianza se fortaleció, lo que permitió un verdadero trabajo de equipo con él ya que para plantear un proyecto participativo debíamos trabajar con ellos, como profundos conocedores de la zona, más allá de su condición de propietarios.
Otros de los actores sociales consultados previamente fueron las comunidades indígenas. A través del Consejo Provincial del Aborigen se cumplió con el convenio 169 de la OIT con respecto a la consulta previa, libre e informada cuando se trata de temas que los atañen en su situación pasada, presente o futura. 
Existieron trabajos de gran escala que necesitaron el apoyo de otras áreas del gobierno provincial. Una de las primeras acciones, fue el trazado por parte de Vialidad Provincial de un nuevo camino de 1.800 metros de largo, que garantiza el  acceso público desde la ruta provincial N°9 hasta el sitio. Con la Dirección de Recursos Naturales se gestionaron las picadas antiincendios, fundamentales para mantener el sitio protegido frente a los incendios rurales estivales.
Una situación alarmante era que en informes arqueológicos se manifestaba la complejidad del estado de las represas. Se destacaba el “crecimiento de la vegetación sobre el área de relleno de las represas, la acción erosiva del viento y precipitaciones y la presencia de líquenes, algas y musgos sobre la superficie de las rocas.” 
Ante esta situación resultaba urgente que equipos especializados intervengan en el sitio.
Así se retomó la investigación. Entre 2017 y 2019 se cumplieron tres campañas arqueológicas a cargo del equipo de la Dra. Mónica Berón, en las que se realizaron prospecciones, excavaciones, análisis de laboratorio, fechados radiocarbónicos, tomas aéreas con drones para fotogrametría y realización de modelados 3D. 
Relata en la ponencia institucional, Dini Calderón » …Uno de los hallazgos más importantes se relaciona con una inhumación humana, cuyo análisis de laboratorio arrojó una antigüedad de 6.000 años antes del presente. La particularidad del entierro es que se encontraba acompañado de un ajuar compuesto por 3 instrumentos de hueso, un crayón de ocre rojo, un colgante de mejillón de agua dulce y 8 artefactos líticos. 
Ante la presencia del cuerpo de uno de los antiguos habitantes de inmediato se dio aviso  al Consejo Provincial del Aborigen y al Consejo de “Lonkos” Ranquel de La Pampa, cuya determinación fue solicitar que los restos humanos volvieran a ser enterrados en el sitio mediante una ceremonia sagrada, una vez terminados los análisis correspondientes.  A partir de entonces, la participación de las comunidades indígenas se intensificó.
Del mismo modo, Cuchillo Có y La Adela, pueblos ubicados a 40 y 70 kilómetros respectivamente, tienen representantes formándose como guías locales, entre los cuales se encuentran también referentes de las comunidades indígenas. El rol de las localidades fue fundamental para el desarrollo del proyecto. Algunas vecinas acompañaron desde un principio con logística, mano de obra, compra y traslado de materiales, contacto, mediación y alojamiento para los equipos de trabajo. Se han realizado jornadas didácticas y de intercambio, entre el equipo de arqueología, alumnos/as de la Escuela de Cuchillo Có y la Secretaría de Cultura. 
Una vez realizadas las acciones de mantenimiento y limpieza comenzamos con el diseño del circuito interpretativo de 2500 metros. Para concretarlo fueron necesarias numerosas jornadas de trabajo en las que recorrimos el lugar y determinamos las mejores y más seguras opciones de recorrido. Establecimos los hitos donde ya se encuentra la cartelería instalada con la información correspondiente.» 
Otra característica importante del proyecto se relaciona con la transferencia científica. Con la información proporcionada por el equipo de arqueólogos, se elaboró el guión museográfico para la cartelería con un lenguaje asequible para el público general, siempre privilegiando la idea de acercar a los visitantes a la experiencia de los antiguos pobladores y con esa información, se diseñaron los carteles y se elaboraron animaciones con la tecnología  de realidad aumentada.
El trabajo coordinado entre la Secretaría de Cultura, el equipo de arqueología y las empresas contratadas para la elaboración de la cartelería fue central. Se contó con la participación de una agencia de producción multimedia, Estudio Tamandúa, que se encargó del diseño de folletería, cartelería e insumos para aplicación interactiva. La empresa CamOnApp desarrolló las experiencias de realidad aumentada  a través de su aplicación de descarga gratuita para dispositivos móviles. 
Con el uso de esta tecnología se desea captar la atención de los más jóvenes, la generación de nativos digitales, involucrarlos y despertar el interés por la arqueología pampeana en general y por el proyecto, en particular, para lo cual se elaboró folletería que incluyó un importante trabajo de revitalización de la lengua indígena ranquel y la posibilidad de obtener experiencias interactivas mediante dispositivo móvil.
El proyecto incluye cartelería diseñada para compartir el resultado de las investigaciones arqueológicas e históricas con los visitantes al sitio, a lo largo del sendero interpretativo de 2.500 metros. Una de las características particulares es que tres de estos nueve carteles, están diseñados para activar experiencias de Realidad Aumentada,recreando, mediante animaciones, audios y fotografías, el uso que le dieron los antepasados al sitio. 
Se usa para ello una aplicación de descarga gratuita para dispositivos móviles llamada CamOnApp, desarrollada por emprendedores pampeanos radicados en Buenos Aires. La Realidad Aumentada (R.A.) forma parte de las llamadas “tecnologías inmersivas”, junto con la realidad virtual, y son herramientas que comenzaron a utilizarse no hace muchos años en sitios patrimoniales, museos y bibliografía educativa. En Argentina, es una aplicación aún novedosa y no es común verla instrumentada en proyectos culturales, sino más bien aplicada al marketing, publicidad y entretenimiento (por ejemplo el Pokemon Go). 
Los tres carteles arriba mencionados, junto a folletería diseñada para difusión del sitio, pueden ser impresos fácilmente en cualquier soporte y activar las experiencias de R.A. en cualquier locación que cuente con conexión a internet (escuelas, museos, ferias del libro, etc.). 

Aspecto tecnológico
El aspecto tecnológico es una de las características novedosas del proyecto. Cerro de los Viejos se encuentra en una zona donde no existe señal de internet ni telefonía móvil, pero en mayo de 2020 se logró programar la aplicación para que funcione sin conexión en el sitio mismo, mediante paquetes de datos previamente instalados en los dispositivos de los visitantes y guías que visiten el sitio. Esto se realizó con 2.600 dólares aportados por el British Museum de Londres, mediante gestiones realizadas por la arqueóloga Dra. Mónica Berón y el antropólogo Ignacio Roca (Director del proyecto entre 2016 a 2019) ante el Centro de Excelencia de Investigación Latinoamericana de Santo Domingo (https://www.sdcelarbritishmuseum.org/).
De esta manera, estamos ante uno de los primeros sitios arqueológicos interactivos en la Argentina cuya aplicación tecnológica está dirigida a la difusión del sitio y transferencia científica para público general. Los carteles escaneados en los dispositivos móviles activan videos, animaciones, audios e imágenes que interactúan con el entorno circundante, recreando, el uso que le dieron los antepasados al sitio. 
La otra característica y muy importante para Cultura, es avanzar en conjunto con las comunidades indígenas y localidades vecinas. De este modo, entendemos a los patrimonios como resultado de procesos históricos dinámicos y conflictivos, que configuran la identidad de la región y representan bienes de alto valor afectivo y político para los habitantes en su conjunto. Generando también la posibilidad de desarrollo y empleo local.
Otro de los puntos principales del proyecto es el vinculado con la participación. Cerro de los Viejos es patrimonio público de los pampeanos, pero el sitio se encuentra dentro de una propiedad privada, un establecimiento de producción ganadera. Sus propietarios, la familia Iturrioz, pobladores criollos de la zona desde tres generaciones, participan con predisposición hacia la valorización del patrimonio y su apertura al público. Del mismo modo, lo hacen las localidades vecinas, para quienes el sitio constituye un hito representativo de identidad. Pero un especial énfasis está puesto en el trabajo conjunto con las comunidades indígenas de la provincia. Reconociendo el derecho indígena a la gestión de su patrimonio en La Pampa, en el marco de la Ley Provincial Nº 3.104, el objetivo es promover la participación de referentes de los pueblos ranquel y mapuche como guías y anfitriones del sitio.

El futuro:
La secretaria de Cultura, Adriana Maggio , agrega ante la consulta de conseguir que » aún quedan varias etapas por concretar: Continuar con las investigaciones arqueológicas, implementar instalaciones, como una casilla de recepción con un centro de interpretación, baños y agua potable, y, finalmente, completar la capacitación de guías especializados en sitios patrimoniales para emprender las visitas. Preveíamos cumplir estos objetivos en el transcurso del año 2020, pero la crisis actual provocada por la pandemia mundial demoró la tarea, no obstante ello confiamos en que se retomarán acciones y que ya cuentan con una extensión de fondos del ASETUR y el apoyo del actual gobernador Ziliotto.